¿Qué puedo hacer si mi hija o hijo no me permite participar en sus cosas?
Algunas hijas e hijos, especialmente en la adolescencia, prefieren que madres, padres y cuidadores se mantengan distanciados de su vida social. Por ejemplo, es común encontrarse con la frase “mami, déjame… yo veré qué hago”. Esta actitud es típica de los preadolescentes y adolescentes -no sólo del suyo-; y no significa que usted tenga que quedarse de brazos cruzados. Cuando se enfrente a estas situaciones lo importante es que mantenga la calma y le haga saber a su hija o hijo que usted está ahí, disponible si necesita que le ayude en algo.
No lo tome como algo personal, muchas veces ese silencio se debe a cambios normales en el desarrollo: una mayor necesidad de privacidad, una mayor cercanía con los amigos, miedo a la desaprobación. Aproveche las ocasiones en las que su hija o hijo le habla, para promover las conversaciones. Muchas veces dejan de hablar porque los padres se apresuran a hacerlo y hacen juicios sobre lo que les están contando.